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En la historia reciente, uno de los cambios más profundos en el panorama religioso global, ha sido el incesante descenso proporcional de las comunidades cristianas históricas en Oriente Medio: En 1910, los cristianos representaban el 13.6% de la población de Oriente Medio. En 2010, los cristianos eran sólo el 4.2% de la región. En 2025, se espera que los cristianos constituyan el 3.6%.

Existen tres expresiones mayoritarias del cristianismo en Oriente Medio: las iglesias históricas (Ortodoxa y Católica Romana), las iglesias misioneras modernas (Protestantes e Independientes) y las iglesias de inmigrantes (muchas tradiciones).

Dos dinámicas

La situación demográfica de los cristianos en Oriente Medio es bastante singular y ha cambiado dramáticamente durante los últimos 100 años, como consecuencia de dos dinámicas simultáneas:

  • La emigración. Las comunidades cristianas históricas abandonaban la región, principalmente, con destino a Europa, América del Norte y Australia; y
  • La inmigración. La llegada de trabajadores cristianos a los países ricos en petróleo y de mayoría musulmana.

Otra tendencia relacionada con la inmigración en Oriente Medio es la llegada de misioneros a la región, principalmente protestantes e independientes.

Entre 1910 y 2010, nueve países del Medio Oriente experimentaron descensos significativos del porcentaje de cristianos en su población: Egipto, Irak, Irán, Israel, Jordania, Líbano, los territorios palestinos, Siria y Turquía.

Dos razones principales han causado este declive:

  • Un menor índice de nacimientos; y
  • La emigración provocada por la guerra, los conflictos y las persecuciones.[1]

Al mismo tiempo, seis países de Oriente Medio han tenido una enorme afluencia de cristianos, sobre todo desde 1970: Bahréin, Kuwait, Omán, Catar, Arabia Saudí, y los Emiratos Árabes. Estos cristianos son en su mayoría emigrantes de Filipinas, Corea del Sur, y otros países, que trabajan en la producción del petróleo, en la construcción, en tareas domésticas y otros trabajos en la prestaciones de servicios.

Las denominaciones

Los cristianos ortodoxos constituyen la tradición cristiana mayoritaria en Oriente Medio. Los países con más cristianos ortodoxos son Egipto (Coptos), Chipre (Griegos) y Siria (Armenios, Griegos y Sirios). La emigración, sin embargo, ha afectado profundamente a las iglesias ortodoxas, que han descendido su cuota de población regional del 11,8 % en 1910 a sólo el 2,7% en 2010 y con probabilidades de llegar al 2,2% en 2025. Al mismo tiempo, los católicos romanos, protestantes e independientes han aumentado su proporción entre la población cristiana de la región. Una razón de este aumento es el enorme número de trabajadores católico romanos (como los filipinos) que se encuentran en países como Arabia Saudí.

Las implicaciones

Estas y otras tendencias señalan un futuro incierto para los cristianos en Oriente Medio. Los cristianos de estas comunidades históricas están ahora presentes en todo el mundo, y los cristianos de todo el mundo están acercándose cada vez más a Oriente Medio. Esta tendencia dual de migración de cristianos de y hacia la región, presenta un desafío único para apoyar a los cristianos en Oriente Medio como comunidades minoritarias sometidas a una intensa presión política y social.

La expansión del cristianismo al Sur Global, puede verse como un desarrollo positivo para los cristianos sitiados en la región, especialmente en vista de la ruptura poscolonial entre los conceptos “occidental” y “cristiano”. Actualmente, el mundo está más en sintonía con el conflicto de los cristianos en Oriente Medio. Algunas de sus preocupaciones apremiantes pueden afrontarse abogando por la libertad para todas las minorías religiosas en países que experimentan grandes restricciones sociales o gubernamentales.

Los cristianos de Oriente Medio en la diáspora tienen la oportunidad de participar en el diálogo entre distintos credos con gente de otras religiones de una forma que normalmente no es posible en sus países de origen debido a las tensas relaciones entre judíos, cristianos y musulmanes. Los seguidores de estas religiones son capaces de trabajar juntos mejor desde la distancia para promocionar la paz en su región. Todos los cristianos tienen una renovada responsabilidad de promover el diálogo y la cooperación entre las diferentes sensibilidades religiosas en el contexto de los cambios en el panorama religioso de Oriente Medio.

Esta breve visión es un extracto de “Ongoing Exodus: Tracking Emigration of Christians from the Middle East”, (Exodo en curso: un seguimiento de la migración de los cristianos de Oriente Medio) de Todd M. Johnson y Gina A. Zurlo, Harvard Journal of Middle Eastern Politics and Policy, Primavera 2014.

Notas

  1. Véase el artículo de Wafik Wahba, “Disturbios en Oriente Medio: Implicaciones locales y globales para los cristianos”, en el número de noviembre de 2013 de Lausanne Análisis Global.